martes, 26 de enero de 2010

DIOS ES LA FUENTE DE VIDA QUE NECESITAS


Jeremías 17:8
Por que será como el árbol plantado junto a las aguas, que junto a la corriente echara sus raíces y no vera cuando viene el calor, sino que su hoja estará verde; y en el año de sequia no se fatigara, ni dejara de dar fruto. 

Hoy mientras leía un correo sobre unos mensajes que me envían, pensaba y meditaba y El Señor me dirigió hacia este versículo.
Si nos fijamos en los arboles, tienen raíces, esas mismas raíces hacen que ellos estén firmes, pero el agua juega un papel importante en la vida de todo árbol o de toda planta. Entonces meditaba en que muchas veces nosotros como cristianos estamos alejados de nuestra fuente de vida que es Cristo. Y es que de este versículo podemos ver la comparación de la vida de un árbol con nuestras propias vidas en el cristianismo, pues nosotros alejados de Dios carecemos de vida, por que El es quien nos permite estar llenos de vigor, llenos de todo lo bueno que existe en este mundo. Y entonces un árbol esta frondoso, lleno de vida y dando fruto por que sus raíces están junto a corrientes de agua o por que se le esta proporcionando agua todos los días.
Podemos ver también lo que dice en este versículo “ y no vera cuando viene el calor sino que su hoja estará verde; y en el año de sequia no se fatigara, ni dejara de dar fruto” es decir que si estamos firmes sobre nuestra roca que es Cristo y estamos junto a El, estaremos seguros, tranquilos, confiados, gozosos por que nuestra vida depende únicamente de El y no de las circunstancias que nos rodean, por que El es nuestra fuente de vida y si estamos junto a El lo tenemos todo, los problemas no nos afectaran, las dificultades no nos harán flaquear por que sabemos en quien hemos creído y confiado, por que esa fuente de agua es Eterna y nunca se acaba.
Hermano te invito a que no te alejes de tu fuente de Vida que es Cristo, pues muchas veces los afanes de la vida nos hacen alejarnos de El y es por ello que vivimos cansados, cargados, y sentimos que estamos a punto de desfallecer.
Este día decídete a plantarte junto a esa corriente de agua que te da Dios y no moverte nunca más, por que ahí estarás mas lleno de vida que nunca.
Autora: Patty Abrego

1 comentario:

Anónimo dijo...

Mi muy querida amiga:

¡Dios te Bendiga! Este escrito me pareció muy hermoso y lleno de verdad. Lejos de Dios, nuestras vidas no son iguales.
Desde acá te envío un abrazote, sigue siempre adelante.

Bendiciones,

Brendaliz